domingo, 24 de octubre de 2010

HACER PAN


Esta semana nos hemos quedado cortos con el pan que compramos en el pueblo, así que esta tarde después de la excursión me he puesto con las manos en la masa. Se necesita harina, sal, agua y levadura. Las proporciones dependen de la calidad de la harina que se utilice, pero la misma masa os dirá al tacto la consistencia necesaria para amasarla con comodidad. La mezcla se amasa bastante rato, que quede elástica. Lo ideal es hacerlo con levadura de panadería, pero si no hay, le damos a la Royal de toda la vida. De todas maneras, se puede conseguir levadura sin tener que comprala: es un secretillo, veréis: las levaduras son hongos unicelulares que viven en el ambiente que nos rodea. Es cuestión de convencerlos para que vivan en nuestra casa. La técnica consiste en coger una bolita hecha de harina y agua, del tamaño de una pelota de ping-pong, y dejarla reposar en un lugar calentito, por ejemplo en la cocina, tapada con un pañito para que no se reseque. Al cabo de dos o tres días, si a vuestro alrededor hay levaduras y les ha parecido agradable la bolita, veréis que la superficie de ésta se ha cuarteado, estriada, y si la amasáis un poquito y la oléis notaréis el inequívoco olor a levadura comiéndose la harina, es decir, fermentando los glúcidos de la harina. El olor es a cerveza. Para hacer pan, no tenéis más que tomar un trozo de la bolita de harina, mezclarla con la masa que estéis preparando y dejarla actuar durante un par de horas, tapadito con un paño húmedo. Al cabo de ese tiempo, la masa debe aumentar su volumen debido a los gases que se desprenden en la fermentación.

Ya sea con una levadura u otra, le hemos dado la forma de panecillos...¡y al horno! Un ratito hasta que se ve la corteza doradita.


Para mantener viva la bolita de levadura, tenéis que ir alimentándola cada tres o cuatro días con harina nueva, por lo que cogéis el trocito de bolita y la amasáis con harina y un poquito de agua. Así vivirá eternamente...¡quién fuera levadura...!
De todas maneras, no queda con la consistencia que consiguen en las panaderías. Pensad que la harina que podemos comprar normalmente en las tiendas no tiene la fuerza necesaria para fermentar adecuadamente.

2 comentarios:

aricorural dijo...

ese pan recien hecho, tostado con un poquito de ajo y un buen chorreon de aceite de oliva y una pizca de sal, es un manjar que ya quisieran muchos.

Robin dijo...

Lo que pasa es que se necesita levadura natural para que salga bien, la Royal no tiene suficiente potencia. Se tiene que usar natural y dejar fermentar la masa por lo menos 2 horas.Si lo haces como yo lo hice ayer, queda duro por fuera y la miga demasiado apretada. Pero como era para mi marido, que cuando tiene hambre se come hasta las piedras, pues le ha parecido muy rico.