viernes, 5 de noviembre de 2010

FOTOS DEL HUERTO. "SELECCION INVERSA" DE MAIZ








Los calçots están progresando. Ya falta menos para comérnoslos con la salsa tan rica que los acompaña. La original es con avellanas, pero como nosotros no tenemos avellanos, la haremos con almendras, que queda igual de buena. Las habas ya están saliendo, las acabamos de regar para ayudarlas un poco. Son de la variedad muchamiel. Las espinacas tienen esta pinta, aún son pequeñas pero crecen muy rápido. Éstas son de semillas del año anterior, de nuestra propia cosecha.
Con estos brotes de maíz (primera foto) voy a hacer un experimento. Aunque ahora no es tiempo de plantarlo, porque no resiste las heladas, ha germinado gracias al calor del estiércol del corral. Mientras no hiele, dejaré que crezca en el huerto. Cuando el tiempo cambie, transplantaré algunos de estos plantones y los protegeré con plásticos, en un pequeño invernadero. Y voy a hacer lo que yo llamo selección inversa: a ver qué clase de mazorcas salen, y si podemos revertir al tipo original. El maíz es muy variable genéticamente, y se hibrida en la naturaleza con mucha facilidad. A saber qué saldrá de estas plantitas. La que presente una semejanza mayor con el maíz más primitivo, dentro de un nivel adecuado de producción, será seleccionada. Haremos pequeños monstruitos Frankestein con cara de maíz tostado.

2 comentarios:

anfiaro dijo...

jejej me gusta a mi eso del guarreteo del calcot estube mirandolo y la verdad es que es un rollo plantarlo pero bueno debe de estar bueno jejeje

Robin dijo...

Están buenísimos, porque a parte que esta cebolla es dulce, y a la brasa quda blandita, la salsa está muy rica. Lo que pasa es que te pones perdido de la ceniza de la hoguera, tú y el mantel que pongas en la mesa, y las servilletas y todo. Esto antes se comía en el campo, cuando la gente estaba labrando y no había nada más que comer. Ahora es también comida de muy señorito, y les gusta a los oficinistas ir a los restaurantes vestidos con traje y corbata y pringarse con los calçots. Se ponen unos baberos grandes para no mancharse.