La verdad es que estando aquí, nos vamos sintiendo cada vez más lejos del mundo, como si nos hundiéramos en la niebla de otra dimensión.(No caerá esa breva...). Oímos las noticias por la radio, y ¡vaya follones que hay montados! Aquí...todo es paz. Bueno, de momento ayer por la tarde aparecieron unos moros a recoger las aceitunas del vecino, y los perros se pusieron como motos, aunque luego mis fieras se moderaron y les dejaron hacer. Esta mañana los moritos ya han venido a primera hora. Hay una actividad frenética con la recogida de la oliva. Nosotros estamos esperando a que maduren un poco más, porque entonces tienen más aceite. Pero... anuncian fríos intensos para la semana que viene...a ver si se van a helar...
La vida del agricultor es incierta. Estás completamente a merced de la naturaleza. Claro que, bien pensado, en la vida urbanita la incertidumbre es peor, porque estás a merced de los jefes cochinillo, rosados y gooooorrrdos, o de los tiburones financieros que hacen caer gobiernos y machacan países a su albur...que se lo digan a los irlandeses, que parece que van a sufrir recortes sociales y subidas de impuestos draconianas. Total, que acaban sacando la pasta siempre del ciudadano...
Prefiero pues mantenerme en las nieblas, porque, bien pensado...¿no será este el mundo real y lo que escucho por la radio una ilusión...?
1 comentario:
Que verdad dices y que triste que no se pueda llevar una vida de autosuficiencia plena, pero siempre hay que pagar algo con el vil dinero y ese no llueve del cielo ni sale de la tierra.
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