miércoles, 17 de noviembre de 2010

REMEDIO NATURAL PARA LAS TENDINITIS: EL LLANTEN MENOR



Hace bastante tiempo, de tanto caminar por los montes, tuve unos dolores muy fuertes en el tendón de Aquiles del pie izquierdo. Fui al médico y me dió la solución definitiva: pues no camine más, que cada vez que le duele es que se le está desgarrando y se le romperá: entonces, al quirófano,y se quedó tan pancho. Como siempre, receta de antiinflamatorio no esteroideo en pomada y en pastilla. Las pastillas las compró Rita la cantaora, y la pomada me la puse, pero no encontré alivio alguno.
Rápidamente consulté los libros sobre plantas: ¿habría solución natural para este mal tan molesto? Con lo andarines que somos, cualquiera se queda ya en plan yaya al lado del fuego a nuestra edad.
Pues sí: la solución está en el llantén menor (Plantago lanceolata) y vaya pedazo de solución, porque desde que hice este tratamiento con llantén, nunca más he tenido molestias en ese tendón. Si acaso, después de caminar mucho, se insinúa el inicio de una leve molestia, pero desaparece con unas horas de reposo. Yo misma estoy impresionada de la eficacia de esta modestísima planta, que de momento por aquí no consigo localizar, pero que espero encontrar tarde o temprano, pues es muy abundante.
El remedio consiste en coger unas cuantas hojas de la roseta basal del llantén. Estas hojas se ponen en una sartén con aceite, preferiblemente de oliva, y a fuego muy lento se deja que se pochen. Cuando las hojas han cambiado el color y se ven blanditas, se dejan enfriar (importante, no nos vayamos a quemar) y cuando están templadas se colocan sin escurrir, bien mojaditas con aceite, en un paño limpio. El paño se coloca sobre el tendón dolorido, se cubre con una venda y se deja tres días. Al cabo de los cuales, al menos yo, ya no noté molestia alguna.
La verdad, un remedio excepcional.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Pues gracias por la sugerencia ya provare y os lo cuento