Hace sol, viento y frío: los tres mejores agentes ambientales para eliminar microorganismos nocivos de nuestros semilleros. Yo utilizo estas bandejas de porexpan, y funcionan bien. Estas bandejas las encontramos tiradas al lado de un contenedor de basura, hace tiempo. También las suelen regalar si las pides en tiendas de plantas o en cooperativas.
Después de pasar tanto tiempo guardadas, es posible que la humedad haya favorecido en crecimiento de hongos y bacterias, que pueden estar latentes en las zonas húmedas de la bandeja (en algún huequecito roto del porexpan). La agricultura tradicional recomienda tratar estas bandejas de siembra con insecticidas y fungicidas antes de utilizarlas nuevamente, pero conseguiremos un efecto similar sin gastarnos ni un céntimo dejándolas expuestas al sol, al aire y al frío. El frío, potenciado por el viento, y las radiaciones ultravioletas del sol, acabarán con (casi) todo bicho viviente; siempre hay un pequeño tanto por ciento que lo resiste todo, pero no vamos a ser nosotros los que impidamos la evolución de las especies...la asepsia total no existe ni en un quirófano. Para nuestros propositos hortelanos, con esta exposición a los elementos, las bandejas de siembra quedan adecuadamente libres de patógenos.
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