A veces, cuando las condiciones meteorológicas no son favorables, tenemos que estar dentro de casa. Siempre se pueden hacer cosas: limpiar, leer, hablar...pero a veces es necesario o simplemente apetece el no hacer nada.
He conocido a gente que no se permite esto. Simplemente, piensan que dejar de hacer cosas es un sacrilegio. O no tienen el valor de enfrentarse a sus propios pensamientos...
En nuestra vida autosuficiente hemos de estar preparados para estar a solas con nosotros mismos muchas veces; por ejemplo, estos días de lluvia, no conectamos el grupo electrógeno por precaución: son momentos magníficos para reflexionar, pensar, relajarse...
Y uno piensa: todo el mundo ajetreado, asustado, cansado, desmoronándose lentamente el progreso de la humanidad...y aquí estoy yo, más bien que el mundo (nunca mejor dicho).
Fuera de uno mismo, no hay nada tan importante que no pueda esperar...
1 comentario:
Robín , eso que tu comentas me pasaba hace muchos años , me sentía culpable por no hacer nada!!!!!! Cuando tomas conciencia de la vida y si puedes permitirte " no hacer nada " eso es lo más grande. ahhhhh , yo si que algunas cosillas GORROS........ si que te van a gustar ( seguro). Te van a salir unas risas de verdad.
Saludos.
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