UN RETO: HACER MERMELADAS

He de reconocer que la cocina no es un arte que se me de bien. Y sin embargo debo aprender, porque para el invierno es necesario tener comida de reserva. Y las mermeladas son un alimento de primer orden cuando hace frío: energía concentrada. A la vista de la floración de esta hermosa zarzamora, podemos esperar una cosecha futura de moras muy abundante.

He hecho mermelada de moras alguna vez. El problema de estos frutillos son sus semillas. Hay personas que hacen la mermelada con ellas, pero a mí no me gusta la textura en boca, se meten las semillitas entre los dientes y rechinan...seguramente servirán para limpiar el esmalte-dirán algunos- y como laxante seguro, pero no me convence. Hay que tamizar las pulpas, y da bastante trabajo. Pero tendré que esmerarme. Está deliciosa: aunque también hay que encontrar el punto justo de azúcar para que no quede demasiado líquida. Todo un reto. Veremos si aprendemos.