145 litros por metro cuadrado acumulados. Bien. Nos han servido para darnos cuenta de que hay que mejorar la cobertura de la casita de piedra: hay filtraciones. No así en la casita de madera que resiste contra viento y temporal. De hecho nos hemos visto obligados a retirar de manera precautoria los cuadrillos que adornaban la pared, incluída la Santa Cena románica que preside nuestros modestos ágapes. La aparición de estas inquietantes
Caras de Bélmez húmedas así lo ha aconsejado.
Hemos pasado de la sequia a la inundación en pocos dias y sin previo aviso. Aqui no para de llover, nevar y hace un frio que donde mejor se esta en al lado de la chimenea.
ResponderEliminarPues aquí....hoy ya hemos empezado otra vez a coger olivas...con un frío que se hiela la yugular...pero qué leches...disfrutamos....
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