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domingo, 18 de agosto de 2024

UN PEQUEÑO BÁLSAMO

 


El señoro que compró cierta finca no dudó ni un momento en talar la higuera que tanto quería el Ferreret. Pues anda. Quién iba a pensar que después de varios años, una pírrica higuerilla aledaña a mi casa me iba a dar higos al alcance de la mano. 

Un pequeño bálsamo.

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