Una buena opción veraniega para refrescar es el uso de especias. Nada mejor que lanzarse a la cocina asiática, que también van ellos serviditos con temperaturas diabólicas, humedades asfixiantes, tifones y monzones variados. Un pollo al curry con arroz basmati es lo ideal. La salsa es ligera, pues lleva manzana. Y el toque del terruño se lo da la almendra. Refrescante efecto del curry sobre el tracto digestivo.
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