Sigo esmerándome en el tema culinario. Y a fe mia que merece la pena.
Raviolis: tan aparentes y tan sencillos de hacer: la masa es un huevo por cada 100 gramos de harina, y a amasar. Se cortan cuadritos y se rellenan...una salsa de tomate frito con albahaca, perejil, ajo y salvia y un generoso chorreón de aceite les da la cobertura coloreada y vibrante.
El segundo plato: albóndigas. Improvisadas por la carne picada del relleno que sobra...huevo, pan rallado...harina. Esta última, no necesaria...quedan las albóndigas, después de hervidas, densas cual pelotitas de golf. Bueno, no tanto. Comestibles, pero peculiares.
2 comentarios:
En esto, me has dado una lección. Yo te enseñaré: Una Sopa de cebolla, para tu estomaguito y la noche. y una ensalada "diferida", que suele gustar mucho a la muchachada, para el medio día. buen provecho...
Hoy patatas con acelgas tempraneras ¡¡¡
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