Os presento al ídolo de Puig Pelegrí. Es una piedra redonda con incisiones que marcan la silueta de lo que parece un ave nocturna, tal vez un búho. Se encontró cerca de una fuente donde desde siempre iba la gente a curarse de enfermedades oculares. Camps i Camps lo recogió, y tal vez aún esté en posesión de esa familia, porque antes, lo que encontraba uno se lo quedaba, nada de Patrimonio ni otras zarandajas. En tiempos no demasiado lejanos un sacerdote aún ponía una piedrecita sobre los párpados de las personas afectadas por algún mal ocular.
UNA BIÓLOGA EN LA REPÚBLICA INDEPENDENT DE LA SISQUELLA
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
2 comentarios:
Hay lugares, y cercanos, además, donde se podrían montar excavaciones arqueológicas serias. Pero, ya se sabe, para eso no hay pasta, solo para comprar aviones o decepciones humanas similares.
España es un país muy muy pobrecito. 😞
Publicar un comentario