domingo, 23 de abril de 2017

EL GALLO CESAR

Volvemos a tener gallo en La Sisquella. Nos han regalado este espléndido ejemplar que ya venía bautizado como Eleuterio; sin embargo, he decidido dejar atrás mi proverbial complacencia con lo ajeno (dadas las últimas experiencias, se demuestra que no sirve) y darle un nuevo nombre más de mi gusto: César. Dudaba entre éste y Marco Antonio; la tendencia al puterío de este último me ha llevado a desechar tal posibilidad y decantarme por la primera propuesta, sin duda de todo punto más adecuada.

3 comentarios:

Candela. dijo...

Que alegría de ver a César con esa elegancia y ese porte.
Recuerdo que mi abuela decía que cuando alguien te regala un gallo o sueñas con un gallo es que se acercan momentos de gloria , éxitos o cosas pendientes que se van a solucionar con buen fin.
Robín, cuando me vino este recuerdo pensé en el personaje de "El Gallo " en la religión cristiana y para más en breve China celebrará el año del Gallo.
Amiga , que va a ser cierto. Nuevos proyectos con buen fin y gran éxito.
Bravo por César y a disfrutar del canto mañanero que nos indica que se acerca la aurora.

Juli Gan dijo...

Si era nombre de emperador romano el que había de llevar. ¿No sería lo suyo el gallo Claudio, como aquél que tenían los dibujos de la Warner? El chico de abajo tiene dos gallos, jaajaja, en cuanto el gallo joven, nacido y criado en este huerto, acecha una gallina, el gallo viejo va a por él. Cuando crezca un poco más el gallo joven, deberá separarlos, me temo.

Robin dijo...

Candela, tus buenos augurios se han cumplido. Juli Gan, deberá separarlos sin duda. Sólo puede haber un gallo en el gallinero...