Queridos muchachitos de Sherwood, el aceite sisquellano no conoce fronteras, dado que no las hay más que en la mente de algunos
humanoides abstrusos. Así que nuestro oro líquido está ya en tierras de Euskadi. En esas norteñas terranías el aceite es muy valorado, así como nosotros tenemos en gran aprecio joyas como éstas que os muestro, si bien es necesario indicar que en el momento de realizar la foto ya estaban netamente perjudicadas...el txacoli ya forma parte de nuestras células, así como dos pisos de anchoas del Cantábrico y un buen pedazo de queso Idiazábal.
Euskadi y Catalunya hermanados...pero que no se pongan tensos nuestros primos castellanos...de momento que se conformen con haber invadido el Reino de Leon y abducido a los valencianos...pero...en temas gastronómicos...venga, chicos...dejad las veleidades fronterizas...y a gozar de estos manjares, que pobres, igual seremos, pero leches....¡¡qué bien que comemos !!
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