Después de haber instalado nuestra particular Cúpula de Hierro, constato que no sirve de nada: las judías se secan y las tomateras sucumben a este calor fuera de época, y están regadas de ayer por la tarde... Estamos en abril y te puedes ir a bañar a la playa. Tengo buena memoria meteorológica y esto no lo había vivido nunca.
Hemos decidido no plantar nada más. Pero esto es una mala cosa para mí, porque una de mis ilusiones ha sido siempre el huerto.
Miras alrededor y cada vez hay más pinos secos. El horizonte es una imagen móvil de un espejismo desértico, de una tierra reseca.
Y no, no me gusta Arabia.
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