Mikel tuvo la idea de aprovechar más la energía solar y compró esta plaquita captadora de fotones capaz de alimentar a diferentes aparatos como teléfonos móviles y libros electrónicos. Ir de excursión con la plaquita atada a la mochila y comprobar cómo se va cargando con el sol es una gozada. Luego por la noche se puede cargar el móvil aunque estés a 2.000 metros de altura en un prado alpino. No son caras y nos dan un margen más amplio de autosuficiencia energética. Y de seguridad en nuestras aventuras.
4 comentarios:
La verdad es que es una gozada disponer de energía de forma gratuita únicamente por la radiación solar, sin enchufes... pudiendo ser libres y sin la preocupación del móvil e ir a algún lugar a cargar la batería... Es una maravilla!
Por cierto, el color de la tierra de fondo... llamativa... jiji..
Es la pista central de Roland Garros pequeño mío.
¿Veremos triunfar aquí a Nishikori?
Pues...en ello están...el Masters de Londres está que arde...ca-lien-teee...
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