Ya se cumplen oficialmente dos meses y un día sin ver llover. No hace tanto calor como el verano pasado pero la sequía se recrudece. Los árboles sufren: las olivas empiezan a arrugarse y los almendros parecen mojamas. En el cielo no hay el menor rastro de nubes. El resto de Catalunya, excepto algunas zonas muy concretas como Pirineos y algún rincón al que le ha tocado la lotería de las tormentas de verano, está igual. A esto, el Servei Meteorològic de Catalunya, siguiendo su política del
no passa res, lo califica en su informe de julio como episodio de precipitaciones muy irregulares. Fantástico. Nunca pasa nada, que nadie se altere, no vaya a tomar decisiones por su cuenta. No hay sequía, esta palabra no aparece en los resúmenes oficiales.
La verdad está aquí fuera, lejos de sus receptores de televisión...
2 comentarios:
Me pongo a pensar que si el tiempo está "loco" o los humanos hemos colaborado para que todo esto sea un "locura".
No llueve donde realmente tiene que llover y luego se desbordan los ríos arrasando con todo en zonas que no hace falta tanta lluvia.
Aquí se nos está cambiando el clima estupendo porque hace un calor extremo y habrá que recurrir al riego con la lluvia recogida en invierno ( si llueve ). Este verano hemos perdido algunos frutales de muchos años que resisten hasta el infierno ... pero se han quemado con el sol y sus raices no resistieron. Ya iremos buscando alternativas . Un beso
Qué pena me da esto que dices...cuando ves árboles tan viejitos que mueren al cambiar las condiciones del clima...es señal de grandes trastornos. Pero lucharemos por seguir adaptándonos.
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