Hemos sido generosos y hemos incluído en el mes de julio unos chaparroncillos caídos a partir de la medianoche del día 31. Sí, ese día que según todos los meteorólogos del mundo iba a caer
la mundial sobre Hispania. Ha caído en otros puntos, ciertamente: chuzos de punta en el Levante, granizos como puños en La Rioja, Castellón, puntos mesetarios...y en este rincón, nada de nada. Apenas 6 litros por metro cuadrado, que con los 3,5 caídos en unos pequeños chubasquillos dispersos durante unos pocos días del mes, totalizan 9,5 litros por metro cuadrado de un julio que pasará a la historia por haber fulminado todos los récords de recalentamiento atmosférico habidos y por haber. Lo mires por donde lo mires, se han superado máximas, mínimas, medias de las máximas, medias de las mínimas, días sin llover, noches tropicales, calores a 5.500 metros de altura (500 hectopascales)...Hispania no solamente se quedará vacía por baja natalidad y por emigración ante la precariedad del país, sino porque, si la tendencia no cambia, en pocos años va a ser una península inhabitable si no es a costa de un esfuerzo ímprobo.
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