¿IMPORTA LO QUE SE IMPORTA?

Este año no se va a plantar tanta patata en Hispania porque el año pasado les pagaron entre 4 y 8 céntimos el kilo a los agricultores, con lo que la pérdida por hectárea dicen éstos que es inasumible.
Los tomates canarios no saltarán el charco este año tampoco, porque los productores isleños no pueden competir en precio con el tomate marroquí, amén que el Gobierno español no paga a tiempo las ayudas que promete al transporte desde Canarias a la península. Así que han decidido dedicarse al autoconsumo y centrarse en su mercado interno.
Se añade a nuestro vecino marroquí otro país que puede vender sus hortalizas en la UE: Egipto. Pero tanto uno como otro no contemplan las mismas limitaciones en cuanto al uso de pesticidas que las autoridades sanitarias comunitarias. Y sin embargo, se permite la importación de estos productos, en detrimento de la agricultura europea, regulada en exceso.
De esta manera sucede que luego hay análisis de pesticidas realizados por organismos de la Unión Europea que dan valores inapropiados en frutas como las fresas, manzanas y melocotones, con altas tasas de insecticidas múltiples.

"En analisis efectuados en la campaña 2012/2013 los cítricos marroquies multiplicaban por 6 los niveles de pesticidas de los de la Comunidad Valenciana.
Estos datos fueron confirmados por delegados de la Dirección General de Salud y Protección al Consumidor de la Comisión Europea, que se desplazaron a plantaciones marroquies.

El Gobierno de Marruecos presiona a la UE para aprobar, cuanto antes, un acuerdo para liberar el comercio de frutas y verduras entre la UE y Marruecos. Las organizaciones agrarias valencianas están denunciando esta competencia desleal con nuestros productos, ya que el uso de productos fitosanitarios que hacen en las explotaciones marroquis superan los límites máximos de residuos, y a lo que se añade el bajo coste de la mano de obra por la explotación infantil y el salario de los trabajadores que es 15 veces más bajo que en España." según Robinalia.com