Ya tenemos las olivas gordales preparadas. Después de tenerlas en remojo durante 15 días cambiándoles el agua a diario, pasamos a embotellarlas con su aliño. Este consiste en romero, tomillo y ajos pelados aplastados. Se coloca una capa de olivas y una de aliño, y así sucesivamente se van haciendo pisos. La última capa ha de ser de hierbas, porque todas las olivas deben quedar sumergidas en la salmuera con la que se rellenará el botellón, echa a razón de 70 gramos de sal por litro de agua. En unos días se podrán comer.
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