La Cartuja de Scala Dei nos enseña cómo se gestionaba el agua en el siglo XVIII. El sistema incluía la captación, la distribución y la evacuación.
El agua para la Cartuja se capta de la Font del Manitral. De la fuente pasa a una mina que aboca el agua en una gran cisterna. Desde la cisterna, por un sistema de canales y balsas, el agua se distribuía a todas las estancias de la Cartuja; a cada celda llegaba un caudal de agua adecuado para cubrir el riego del jardincito y las tareas de higiene del monje.
Veamos la celda C: el agua llega por una canalización a una cisterna bajo la escalera.
|
Cisterna superior y huerto |
De ella nace una conducción que va para el huerto y otra que transporta el agua a otra cisterna en el jardín del nivel inferior.
|
Cisterna del nivel inferior y para jardín e higiene |
El agua sobrante va a parar a una cloaca que conecta todas las celdas; esta cloaca se limpiaba periódicamente echando gran cantidad de agua desde otras dos grandes balsas. A buen seguro, estas aguas negras servirían para abonar el huerto comunal cerrando así el ciclo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario