jueves, 28 de junio de 2012

MUSICA

Qué grande es tener amigos músicos. Un atardecer acompañados con guitarras y percusión es un regalo que se recordará toda la vida, porque es una expresión del agrado que otros sienten por estar aquí. Por estar todos juntos. Gracias.

7 comentarios:

Eulàlia dijo...

Estas fotos con el atardecer al fondo....los musicos que se les ve de lo mas relajados......estupendo....me hago una idea de la gozada del momento ....;)...no existe nada mas ;) a que si¿?

Eulàlia dijo...

jajjajajajajaj no me habia fijado en la percusion.....si es que el que no tiene musica es por que no quiere ;)

Sla-Mori dijo...

Sana envidia,happy Sisquelleros al poder.

Robin dijo...

La percusión es de lo más auténtica, un cubo de plástico. Pero el ritmillo de la criatura...es que el que sabe, sabe. Y el guitarrista...anda que no toca bien ni ná...
Y sí, esos momentos quedan para siempre. Y no hay nada más. Ya son por siempre nuestros.

Gorgk dijo...

La vibración del aire cuando transmite la música es una manera, sin duda, de influir en el universo. El sonido de las esferas se siente al atardecer, al amanecer, en esos momentos de paso entre los mundos, cuando los velos que los separan se hacen tenues.

a1 dijo...

no tiene nada que ver con el post pero lo estaba leyendo y me apetecia compartirlo http://es.scribd.com/doc/12430660/Diamond-Jared-Colapso-Por-Que-Algunas-Sociedades-Perduran-y-Otras-en

habla de la sobreexplotacion de recursos y el exceso de poblacion como detonante de la desaparicion de civilizaciones

Robin dijo...

Bien hecho, a compartir se ha dicho, a1.
Gorgk, sin duda el sonido armónico acerca los mundos. Basta simplemente con oirlo, no hace falta nada más; recibirlo como lo que es, un don.