domingo, 10 de junio de 2012

RAYOS Y CENTELLAS

Uno de los requisitos que le pedí a mi marido cuando buscó una zona para establecer nuestra casita autosuf fue que a ser posible las tormentas en el territorio fueran más moderadas que en la urbanización donde vivíamos. Porque tela marinera: un día os pondré un mapa de la Aemet para que veáis los rayos que caen en una tormenta normalita. Era (es) horroroso.
Al llegar aquí, todo el mundo me dijo que nooooo, que no tuviera miedo, que aquí no pasaban cosas así...pero...va pasando el tiempo y la gente va explicando...
-que si cayó un rayo es un mas cercano, nada, aquí a 200 metros, en un pino, con las personas detro de la casa. Vale.
-que si a un chico le cayó un rayo por estar podando con tormenta.
-que si hay refugios construidos en los taludes terrosos de los trossos para refugiarse cuando había truenos: tengo que poner la foto de un refugio que nos ha enseñado su dueño.
-Y la última...
Pi del Pino es el nombre del Gran Pino de La Palma d´Ebre. Lugar mágico, que concentra fuerzas telúricas. Pues nos han explicado una historia...
Un día, unos veraneantes estaban bajo las ramas del Gran Pino. Una tormenta seca se acercaba. Y cual no fue su sorpresa cuando de repente, dos rayos surgieron a la vez de una enorme y negra nube, y los extremos relampagueantes se tocaron...del contacto de los dos rayos surgió una impresionante lluvia de centellas que cayeron sobre todo el pueblo...
En algunas casas hubo desperfectos.
No sí...ya me extrañaba a mí...

5 comentarios:

Eulàlia dijo...

Yo ya te empezare a llamar Madam Rayo ;) jejjejej yo me uno a las historias ....un verano vi caer uno en direccion a la carretera de Flix espectacular.....con un truenazo!!! jejjejej a mi me encanta ver las tormentas desde la cama ....pero......igual con la suerte que tengo ultimamente un dia de estos me cae un rayo y quedo como un churrasco! jejej

Robin dijo...

Yo de peque tenía miedo a los rayos ya. Luego se me pasó, porque íbamos a veranear al Pirineo cada año, y allí, o te acostumbras o te mueres: tormentaca cada día, y caía cada día uno en el repetidor de la tele de Castellar de N´Hug...
Y el miedo me volvió porque en la urbanización me socarrimaron dos veces sendos aparatos de fax. Caían sobre las casas, y se veían correr las centellas por las líneas eléctricas. Salían chispas de los enchufes. Un día necesité dos valiums de 5 para que no me diera el yuyu final.

Eulàlia dijo...

Juer no me extranya ,hasta yo tendirà yuyu......

a1 dijo...

Con lo bonitas que son las tormentas mujer! A mi lo que me vuelve loca y no me deja dormir y lo odio mucho mucjo mucho son las noches de viento cuando hay alguna rendijita por la que se pueda colar y hacer ruido. Pero los rayos molan!!!

Robin dijo...

Estáis invitados todos a pasar un día de tormenta en mi casa de la urbanización, con permiso de la inquilina: hacemos unas pizzas y---a disfrutar....cuando veáis que la luz y el ruido son síncronos y que se parten los alerillos de las casas...hablamos...........
De corbata se me ponían los ovarios...