Ya hemos recogido olivas de
la llei del xep, y las hemos preparado como nos han explicado: se colocan en una bandeja cubiertas de sal gorda, y se dejan a la serena hasta que se arruguen y las encontremos a nuestro gusto. Unas personas dicen que quince días, otras que una semana, y otras que dos o tres...lo comprobaremos. Antes de cubrirlas con la sal hay que darles un apretujón entre los dedos, sin romperlas,
matxucar-les que se dice.
Hay olivas de más
lleis: tenemos que conseguir que nos hagan una lista y las consignaremos adecuadamente, como se merecen todas estas variedades tan peculiares, autóctonas de estos pueblos y que constituyen una riqueza genética y varietal impresionante.
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