Sarandipia: extraña por inesperada concatenación de casualidades que, sin embargo, conducen a unos hechos...¿tal vez esperados? Twilight zone.
Nuestros vecinos de urbanización jamás mencionaron La Palma. Sin embargo, este verano, por una extraña concatenación de hechos, se enteraron de ciertas relaciones familiares con este lugar...sería muy largo de explicar: la conclusión: han venido a visitarnos, a traernos también recuerdos y saludos de nuestros otros vecinos: de Juanjo, de Montse, de Consuelo, de la gente de Pinedas...y...ay...me ha dado un poquito de melancolía, la verdad.
Melancolía que se arregla pronto con unos panellets y unas tostadas con tomate y anchoas. La cuestión: que al final, este año también me he librado de hacer panellets...jejejeeje...
Aquí, sobre la libreta roja de los secretos inconfesables que enterraré en algún lugar de La Palma algún día, están los panellets, expuestos: de chocolate y coco, de piñones y de almendra.
3 comentarios:
Desde mi rincón de los secretos inconfesables: tienen una pinta buenísima, la verdad.
El sabor es delicioso. Pastelitos para los muertos...que los disfrutamos los vivitos. De esto en México saben bastante: allí estas fiestas son gozosas.
Que conste en acta que los ha hecho Dori. Son regalaítos también...
Publicar un comentario