viernes, 13 de enero de 2012

ALIMENTANDO UN ABEJORRO

En la casa de madera había un abejorro: estaba agonizante, tumbado de costado...así que rápido, se impone la acción inmediata. Lo he cogido, lo he puesto a salvo, y he ido a la cocina a preparar una disolución de azúcar en agua.

Pensé que la cosa no funcionaría, pero...mojo el dedo índice lo pongo frente a la mandíbula del abejorro...y despliega su trompita succionadora, y absorbe la gotita...le doy otra, y otra...ya no quiere más. Y mueve las alillas, y sale volando, hacia las flores del Iris de Candela...

¡Bien!

Aunque nuestro experto abejero nos comunica que debe ser miel diluída en agua, que el azúcar es perjudicial...es lo primero que tenía a mano, y era una emergencia...no lo dejamos salir al exterior, porque con la niebla que hace...no pasamos de los tres grados en todo

el día...¡a lo mejor es un mensajero que luego dirá a las abejas que somos buenos...!

3 comentarios:

Anónimo dijo...

En realidad no debe ser nada lo que se le de de alimento robin...pero en caso de ...mejor miel, que azucar, por supuesto...

Que dificil es saber cuando intervenir o no...!! y aunque alguno pueda pensar que solo sea un abejorro, igual actuariamos con cualquier ser...

No estoy criticando nada, pues yo mismo no se cual es el limite entre ayudar o intervenir...

Hay animales, muchos, que una vez han sido tocados por el hombre, son rechazados o matados por sus congeneres...

Otro importante tema que me parece relevante investigar...

Yo creo que hay que saber ayudar y hay que saber dejar morir...

Cuando tu ves uno de esos documentales de la 2 y ves como una cria herida de cualquier animal, vaga herida irremediablemente a la muerte, su madre ya no lo busca y solo tiene buitres cerca y tu sabes que solo bajando el camara del jeep podria "salvarlo"...tu que harias robin? que hariais?

Robin dijo...

SIN DUDA ALGUNA: INTERVENIR.
Lo he hecho cientos de veces.
Normalmente en caso de animales rechazados por sus madres es casi imposible que sobrevivan: "algo" va mal desde el nacimiento. Pero yo intervengo.
En caso de animales heridos, es difícil valorar el alcance de los males...yo intervengo.
Porcentaje de éxito: reducidísimo. No me importa: yo intervengo.
Porque me pongo invariablemente en el lugar del que necesita ayuda: y a mí me gustaría que alguien, humano o divino, si yo estuviera en su lugar, INTERVINIERA.
Es lo que tiene ser medio hada... :)

Anónimo dijo...

Imagino praderas llenas de caballos corriendo, tranquilos, salvajes, vivos...inmensos lagos y caudolosos rios repletos de vida...

Veo ahora, como si pudiera tocarlo con la punta de los dedos, un mundo sin ese dolor, sin confusion...donde no hay miedo, donde no hay mas oscuridad, donde se puede vivir y morir en paz...

Un mundo donde ya no es necesario ser consciente de uno mismo y el dolor se ha marchitado...

Veo que la vida es cosa de un momento y ya no puedo seguir viendo porque mis ojos ya no son esos ojos...porque estan cansados de imaginar, de ver dentro lo que desearian poder vivir fuera...

Eres feliz? feliz? no...pero me siento tranquilo...cansado pero tranquilo...yo no he nacido para ser feliz, sino para ayudar a que otros no tengan que preguntarse si lo son...

Pero...a veces pareces tan perdido? si...y lo estoy...pero lo se y eso me hace estar tranquilo...

Lo se...

Porque hermanos, solo cuando se es consciente de uno mismo, se pregunta como se debe vivir...en ver de vivir...