Como estos días de tanta niebla está haciendo mucho frío, hemos detectado que el aislamiento de la casita de piedra debe mejorarse: pasa una rasca de mil demonios por las ventanas. Y hemos pensado en la solución de los burletes aislantes. Pues nada más sencillo que coger unas tijeras y la espuma del colchón y cortarla a tiras del tamaño que veis en la foto. Luego se toman las medidas de las ventanas, y se pegan con adhesivo. Más tarde pondré cómo queda el invento.
2 comentarios:
Gracias por el tutorial , probare en las puertas del taller que me entra aire por abajo.Saludos
Pues te aseguro que va de perlas. Bien bien bien.
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