lunes, 2 de abril de 2012

DE DOS YEMAS

Tal y como el tamaño sugería, el Gran Huevo era de dos yemas. Aunque en principio me lo iba a comer yo, al ver semejante fuente de nutrientes, mi marido ha abierto unos ojos como platos y me ha preguntado, así como el que no quiere la cosa: ¿lo vas a querer tú?
No hijo, no, cómetelo tú, que yo me conformo con uno de mi tamaño. La verdad, los huevos de dos yemas son formidables: valen por dos, así que, como yo sufro de una innoble tendencia al engorde porcino, me conformaré con uno más acorde a mi metabolismo.

Moja pan, moja: si con una yema mi niño ya se funde una barra de cuarto enterita hasta que rompe el telillo..con dos yemas, adiós a un pan de kilo...

2 comentarios:

Candela. dijo...

ufff ¡ Robín , esto es una doble ración ! pues vaya par de huevos si todas las gallinas llevaran esos genes :-) Saludos

Robin dijo...

Pues la verdad es que sería formidable, con un huevo ya irías bien servidito...normalmente los huevos de dos yemas los ponen gallinas jóvenes, pero estas del Prat ya son veteranas: lo que quiere decir que están bien alimentadas y están sanotas.