La cerdita Baby tiene miedo de los humanoides. Y eso me produce, por un lado, una gran pena: qué especie odiosa somos...pero por otra, me pone contenta: porque vamos a enmendar este entuerto, en la medida de nuestras posibilidades sisquelliles. ¡Hay que hacer que Baby nos quiera!
Acercarnos a ella es imposible, de momento: huye gritando. Así que pedimos la colaboración de la Guardia Pretoriana perruna: por supuesto, siempre dispuesta a colaborar. Así que hacemos que, lejos de nuestra presencia, interaccionen entre perros y cerdita: a Baby no le asustan ni los perros ni las cabras.
La primera en empezar a jugar es, cómo no, Troya: se pone a su lado y la acompaña por su libre paseo de reconocimiento de toda la finca. Luego llega Boli, el empalagoso -por cariñoso, aunque gruñoso- caniche: a Baby le gusta especialmente. Y así, juntos, van paseando por la finca. Baby toca con su hocico a los perros. Las cabras se asustan un poco de ella, pero a Peque se le ha acercado por detrás, y le ha tocado los huevecillos testiculares con el morrillo...Peque ha dado un respingo, ¡uy!
El lenguaje de Baby es espectacular: emite toda una serie de sonidos con significado. Se impone escucharla: no es un lenguaje que exprese conceptos, sino emociones: no dice tengo hambre, sino que expresa el sentimiento del hambre. Investigaré sobre esto y hablaré de ello. No habla con conceptos, sino con sentires: y eso tendríamos que aprenderlo los humanos...vaya que sí...
4 comentarios:
Suerte en la encomienda ,pero sigo pensando que aqui la que ha tenido mas suerte es baby ;)
Suerte y trabajo vamos a necesitar...de momento vamos avanzando. Entra y sale del corral cuando se lo decimos. Y ya no tiene tanto miedo...
Poco a poco conseguireis que coma de vuestra mano. Mi padre tiene una pareja que le dieron, la cerda, pario 10, quedaron 6. El problema es que nosotros hacemos lo que mas le gusta a Josep y lo dejo ahi para no herir tus sentimientos. Y Baby no a podido caer en mejores manos. Estos animales comen de todo incluidas las sobras de casa, macarrones etc. La hierba tambien les gusta, pero cuidado que su ocico, escarba y busca las raices de los arboles. Para completar su dieta en algun momento, harina de cevada o de maiz.
Gracias por tus consejos: sí que tiene fuerza en el hocico, sí, levanta las piedras gordas como si nada...
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