Con este artilugio se va midiendo la energía acumulada por las baterías que vamos cargando tanto con el grupo electrógeno como cuando el coche funciona. Llevamos acoplado un sistema que permite cargar una batería adicional.
De momento, estamos en fase experimental: una batería dura unas 8 horas, alimentando una radio o la tele, y una bombilla de bajo consumo. No está nada mal. Vamos pasando algunas fases de ¡cuidado, que parpadean las luces! porque el inversor avisa con un pitido cuando la carga ya es baja, pero a veces no lo oímos, y entonces las luces parpadean antes de apagarse, como si estuviésemos en un submarino de la Segunda Guerra Mundial cuando se sumerge a gran profundidad.
Qué divertido...
No hay comentarios:
Publicar un comentario