Se nos ocurrió la idea de que, para igualar las irregularidades del suelo de la casita de piedra, podríamos usar argamasa.
Este suelo lo hicimos con piedras planas (lo más planas que pudimos encontrar por los alrededores) y cemento. Pero quedan muchas irregularidades que nos hacen tropezar. Así que pensamos que haciendo unas carretillas de argamasa podríamos igualar la superficie. La argamasa la hicimos con arcilla, agua y cal. Y pasamos una plana para nivelar.
Los primeros días fueron exitosos: aguantaba bien la argamasa. Pero...
Éste es el aspecto del suelo después de varias semanas. Una plaza de toros parece ésto, puro albero. Y no veáis, que para barrer, se forma una polvareda...tres carretillas de argamasa que pusimos...mis libros, mis muebles, mis...todo...
O sea, muchachos: os aconsejo que NO utilicéis la argamasa para superficies que deben ser pisadas.
Qué horror...Troya piensa: vaya par de petardos...
4 comentarios:
¿Cómo va la cosa? ¿Lo habéis podido arreglar?
No. Cada vez que barremos sacamos media carretilla de tierra. Y cada vez que barremos, hay que quitar la polvareda que se forma en tooooda la casita. :(
De momento quizá os ayude echar agua con un vaporizador antes de barrer.
María, mañana te mando las semillas de judías lengua de fuego.
Sí, si agua ya echamos, ya...se forma un pasteral de campeonato... :(
Publicar un comentario