viernes, 30 de diciembre de 2011

AVALON

Y para poner un toque mágico ya completo al final del día, ved qué imagen tan bonita. Es de J.W. Waterhouse. Un poquito más de magia avalónica. Tenemos muérdago cortado con una hoz de oro ritualmente, así que podemos, por una noche, pensar que estamos en Avalon, de verdad. ¿Quién nos lo impide? Y la luna en creciente, y ese cielo sereno, ese viento (dels collons) que riza el bosque...y esos besos, y ese tacto, ese sentir cuando miro esos ojos verdes...todo es hermoso, creedme, de verdad, porque en nuestras manos humanoides está el crear un mundo delicioso: sólo basta con quererlo, con hacer crecer la bondad, con reir, con abrazar, besar, ¡AMAR!, mirar las estrellas, la luna, hacerle cosquillas con un dedo...¿qué creéis, que no las nota? ¡Claro que sí!
Verde y Cordial encontró el lado oscuro: me riñó por lo que a veces escribo en él. Me ha explicado el porqué. Y mientras lo hacía, he sentido un enorme respeto y admiración por ese hombre, y he pensado que es verdad, que no tengo motivo alguno para quejarme, para ser amarga o dura: está en nuestras manos hacer que el mundo sea un lugar hermoso; creedme, ¡podemos! Y este grito es algo más que aquella expresión futbolística de aquel mundial africano; podemos, está en nuestras manos, de verdad, el mundo es hermoso...anónimo descarnado, de verdad, créeme, lo es...

2 comentarios:

i dijo...

Esta no es Lady Godiva?
Si, es Lady Godiva.
Siempre me cautivo su historia.

Robin dijo...

Sí, es Lady Godiva. Aunque, más que la persona, he escogido la imagen por el caballo. Me apasiona esa expresión de altivez, esa fuerza del orgullo de sentirse hermoso, fuerte...
En fin, amo a los caballos, aunque me he pegado importantes hostiones por querer montar algunos por encima de mis posibilidades, que no son muchas porque soy pequeña y de piernas cortas. Una vez me fisuré las costillas por montar a Linda, la maligna yegua de mi maestra. Y eso que fue ella la que me dijo: alumna mía, ya estás preparada...monta mi cabalgadura...a los diez minutos, la yegua dijo que vale ya de hacer el jiji, pegó un rebrinco y...
qué dura fue la caída...