Para proteger a sus engendros luminosos de las inclemencias meteorológicas, mi maridín ha decidido instalarlos dentro de la casita de madera. Y, ¿dónde mejor que en mi lado de la cama, con acceso fácil a la zona de enchufes?
El equipo consta de tres baterías, el inversor y un cargador de baterías. Suerte que el generador no cabe, que sino, también lo mete. Bien es cierto que naturalmente, de noche todo esto está apagado. Pero queda así, de manera que si me tengo que levantar por algún motivo, tengo que saltar por la parte inferior de la cama: una sacramental.
Los doctos en materias de geomagnetismos se echarán las manos a la cabeza: seguro que me da un yuyu.
Le he dicho a Josep que me cambie el lado de la cama...no quiere, dice que del lado izquierdo no sabe dormir...
Los hay listos, desde luego...
3 comentarios:
Robín , veo que están a 1ºC.
Pues si que llegó el frío de Siberia . ¡ ESTE FRIO SOLO SE SOPORTA BIEN ABRIGADITOS Y CON UN CHUPITO DE ESOS QUE TU TIENES GUARDADOS ...PARA CALENTAR LA TRIPA ! Besos
Bueno, otra vez por aquí. Aunque no venga mucho al caso de la entrada, te digo que oye: estás desaprovechándote como "echadora de cartas y vidente": todo salió como dijiste.
Jaime y Kitti te envían también saludos.
-Candela, aquí dándole a la leche caliente con miel. De momento, no reina el caos.
-Víctor: claro que sí, hombre, blanco y en vasija leche fija...
el tema de las cartas: fíjate que rarísimamente lo hago, pero estabas tan "desesperaíco" que...
pero no lo hago porque... acierto. Las he mirado alguna vez para mí misma y...así ha sido.
Y aunque tenga motivos para mirarlas...me resisto.
Saludos a Jaime y a Kitti.
Publicar un comentario