Con el descenso de temperaturas de estos días, las plantas del huerto se han revitalizado. Las calabaceras, que parecían plantas del averno, han rebrotado. Eso sí, la experiencia nos ha enseñado que en esta zona se han de plantar más tarde, allá por finales de agosto.
Lo mismo pasa con las judías: hay que plantar a finales de agosto. Así resistirán más el ventet dels collons y el solanaje éste.
Bueno, vamos encajando piezas del rompecabezas.
Gracias a Nimbus, el matemático-poeta-jardinero, que nos recomendó repartir el agua del riego en dos veces, mañana y tarde. Nuestro sincero agradecimiento, querido Imhotep, arquitecto del Universo.
2 comentarios:
Siempre tienes una palabra amable para todos. Gracias.
Tengo unas matas de fresas que tienen bastantes frutas ,el año pasado estaban por estas fechas las plantas achicharradas.Que guapo el cesto del huerto ,que gozada.....
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