Si una cosa aprendimos de la vez anterior en que nos sucedió lo mismo es a tener preparadas opciones para procurar que salgan del útero la mayor cantidad de restos placentarios. Una de las cosas que nos aconsejaron es que, aprovechando el cordón que queda fuera de la vulva, atásemos un peso con una cuerda, no demasiado excesivo, para ejercer una fuerza de tracción contínua que promueva la salida de los restos.
Aquí está la imagen de Chivita con un peso colgando del cordón. Una vez ha salido este resto, Josep ha introducido un dedo, previamente lavado con agua y jabón, en la vagina, para ver si notaba la presencia de algún resto más. En principio no ha sido así. Veremos cómo evoluciona la situación.
Cuanto antes se actúe, mejor. Esta foto es de ayer al mediodía.
2 comentarios:
ups....esto impresiona he!! pero si funciona es lo que importa ;)
Te diré que para tener animales, si no tienes dinero para veterinarios, no hay más remedio que asimilar que tendrás que lidiar con yuyus...eso sí, estoy agotada.
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