¡Uy, qué precocidad...mirad ya mi primera cosecha de tomates...! No, es broma. Estos tomates provienen del mercado. Son desechados por tener alguna tara: algunos sí, presentan signos manifiestos de inicios de podredumbre; pero otros se retiran de la venta simplemente por tener alguna pequeña mácula, como el que sostiene Josep en su mano. Así que aquí nos tenéis en plena economía de aprovechamiento. Los reciclamos para nuestro consumo. Los de aspecto más nefasto son procesados y comidos por nuestros animales. La vida, la vida...
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