No sé qué edad debe tener este olivo, pero me parece a mí que bastantes años. Acaso sea centenario. Qué habrá visto esta criatura...de momento, hoy nos ha visto a nosotros los humanoides, a los perros y a las cabras.
No sé si alguien antes lo habrá hecho, pero por si acaso, yo me he acercado y le he dado un abrazo y un buen beso, para que no sea dicho que este venerable árbol, camino de la eternidad, no sea portador de un ósculo de un pobre ser mortal. Así un poquito de mí quedará en este mundo cuando me muera. En la memoria del árbol.
4 comentarios:
Juli también tiene esa costumbre, dice que los árboles tienen alma y si te acercas mucho mucho y escuchas con atención a lo mejor te dejan oírla... sólo si ellos quieren jeje...
Mira este post, hace 5 años, me lo has recordado
http://fotosveronica.blogspot.com/2006/11/sant-llorenc-de-munt.html
Para mí, todo tiene alma; fíjate si seré, que hasta un viejo coche me parece a mí que tiene consciencia...cuando vinieron a llevarse mi Renault 5 del año de la pera, no tuve narices de salir a hablar con el conductor de la grúa...salió Josep, porque yo tenía ganas de llorar...
Veo que no soy el único que se relaciona con los árboles. Jejeje
A mi también me dan penita los coches, y las casa también. :(
Todo tiene alma. Porque cada alma es un trocito de Dios y Dios está en todas partes.
Así sea. Pero que procure manifestarse un poquito más, que últimamente está como de vacaciones. De buen rollito, no sea que me caiga ahora mismo un rayo fulminador...Caritas in veritate...
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