Al final, a mi marido no le salió aquella flauta que quería hacer con una caña. No sonaba. Pero el hombre, que es dado a usar su navajita para hacer dibujitos en la madera, me hizo el otro día este colgante. Neolítico total, salvo por el hecho de que el cordoncillo es de caucho reaprovechado de un adorno urbanita.
Pues con los elementos más sencillos, se puede uno adornar al estilo más primigenio.
Y yo, que no tengo manías, con él que voy al cursillo de Auxiliar...de momento, nadie me ha dicho nada...
2 comentarios:
UMMM tu sabeslo que vale en Urbanilandia un diseño exclusivo ¿?¿? pues a mi me gusta ,por que me gustan estas cosas ,durante un verano lleve cogada a todas horas una piedra del rio (pequeña) no vayas a pensar que me colgue un pedrolo ..jejjeje.....y aun la tengo....un dia de estos me la vuelvo a plantar.....me gusta por lo que significa mas que por lo que es.;)
Josep que se ponga las pilas para crear una coleccion de joyeria autosuficiente de diseño exclusivo Josep fasion ......fijo que triunfa ;) jejje
Veamos, a mí me encanta también la joyería elaborada: una buena joya, o una bisutería atractiva, me resultan agradabilísimas. Pero lo étnico, además, así, de verdad auténtico...tiene un magnetismo especial.
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