miércoles, 7 de septiembre de 2011

CREPES DE LUJO ASIATICO



Ayer, con unas lonchas de jamón de York y otras de queso que subió mi maridín del pueblo, hicimos unas deliciosas crepes crujientes. La masa, nuestra sencilla mezcla de harina, agua y especias. El secreto de que quede crujiente al máximo es dejarla muy muy fina, extendiéndola lo más posible con el rodillo. Y luego freirlas en aceite bien caliente.

Estos lujos asiáticos nos los permitimos a veces, cuando mi maridín recibe algún pequeño ingreso extra ayudando en trabajos del campo. Es la vida, muchachitos de Sherwood...

2 comentarios:

Eulàlia dijo...

Buen provecho ,aun que estas horas este plato es historia ......se me acumula el trabajo...

Robin dijo...

Están buenísimas, y lo mejor es que se preparan en un tres i no res, o sea, en un momento...