No, no me refiero a fincas de formas extrañas o arcillas medicinales: son minerales muy poco abundantes en la naturaleza, y que se utilizan en la fabricación de ingenios tecnológicos. Para extraerlos, deben realizarse graves agresiones al medio ambiente, porque están en muy baja concentración y deben moverse grandes cantidades de tierra. Así que en los paises industrializados, las minas que hay están paralizadas para preservar el medio ambiente. En Estados Unidos hay una mina de este tipo, sin actividad debido al alto nivel de deterioro que causa su explotación. Y como no podía ser de otra manera, si no quieres contaminar tu tierra, vas y lo compras en otro sitio donde estas "chorradas ecologistas" no importen...y cómo no, estas rarezas están en...China. "Cagada l´hemus".
Los chinos se han puesto gallitos y han decidido cortar el suministro a los países industrializados. Mal rollito... Se habla ya de "equilibrio de poder", o sea, que para conseguir estas lindezas, los paises industrializados van a tener que realizar a saber qué concesiones a nuestros amigos asiáticos.
Esto de hablar de los chinos me ha recordado algo que pasó ayer. Parece ser que el escritor Sánchez-Dragó ha escrito en un libro una escena sexual algo escabrosa en la que al parecer intervienen dos niñas de 13 años. Se ha armado la de San Quintín. Las fuerzas vivas de este país piden la retirada del libro en el más puro estilo Torquemada, y que al escritor le supriman su programa sobre literatura en TeleMadrid.
Ay madre, que me parece a mí que se están contagiando algunos usos y costumbres "orientales" en nuestro querido país...Ahora, eso sí, no dirán nada sobre los libros de gran tirada que venden como rosquillas, por ejemplo los libros del señor Ken Follet, en los que hay algunas escenitas porno que ponen cachondo al más pintado...pero como esos son estrellas internacionales, ni tocarlos, no sea que nos tachen de retrógados nuestros amigos de la Unión Europea, y nos pongan una sanción económica, que ahora todo se va a arreglar así, con sanciones a diestro y siniestro.
Me voy a apuntar a un curso de chino ya mismo.
Por cierto, dos libros de Sánchez-Dragó muy recomendables: La prueba del laberinto y El camino del corazón.
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