Lo prometido es deuda, y ahí va la foto de las calabaceras. Tan feliz que me las prometía yo, imaginándome esas empanadas rellenas de cabello de ángel...mmmmm...Pues va a ser que no. Vamos, sólo un milagro lograría que de estos polvos surgieran brotes verdes...más bien veo yo esos lodos...
Estoy desesperada. La única opción es retrasar la plantación de las calabazas, dejándola para finales de agosto, con la esperanza de que hasta que lleguen los primeros fríos puedan fructificar. Porque dan penita...
Es lo que tiene cargarse el filtro de rayos ultravioleta atmosférico, muchachitos de Sherwood...
3 comentarios:
Me parece observar que has "enramado" las matas.
Si las dejas rastreras (te sobran metros cuadrados) las hojas dan sombra a los frutos y quizás evites el problema.
Pues mira, te vamos a hacer caso. Porque es desesperante, Josep.
El calor y ese vientecillo con humedades relativas que tranquilamente bajaran del 40% te dejan mas seco que la mojama.
Ese fruto tiene toda la pinta de una podredumbre apical, casi siempre relacionada con una excesiva transpiracion en las hojas y la imposibilidad de las raices por proporcionarles el agua necesaria.
Si las plantas tarde no creo que llegen a madurar.
Yo las voy plantando bajo los olivos y con plastico de cobertura para que no se escape el agua de la tierra y me aguantan dos semanas sin regar, eso si cuando las riego las inundo.
Es cuestion de ir cogiendole el tranquillo al clima y encajar los cultivos
Un Abrazo. Juli
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