POR Y PARA ALBERTO: REGRESO A LA CASA DE LOS VAMPIROS

El comentario que dejó mi querido Alberto sobre la nostalgia de los tiempos de antaño y la sensación que le había dejado nuestra aventura, como de que no había nada que hacer para recuperarlos, me ha impulsado a darle la brasa esta mañana a mi maridín y preparar el retorno a la casa de los vampiros. Reconozco que yo, en el primer contacto con viejos lugares, me dejo imbuir completamente por su genio, para captar las energías; pero al día siguiente, con las sensaciones metabolizadas, paso a la acción. Con que hay cosas que no regresarán jamás a la luz, ¿eh? Pues aquí está Robin d´Ebre para reparar tal agravio. Dejando a mi marido fuera de la casa entretenido buscando Zerynthias y Aristolochias pistolochias, he tenido una horita para recorrer de arriba a abajo la casona. Alberto, pronto verás los resultados de la restauración del cuero y los brillos de las cosas antiguas reloaded.