El omnipresente enebro esconde en sus troncos y raíces una esencia o aceite de elevadísimo poder curativo, especialmente con aspectos relacionados con la piel (eczemas, pruritos, dermatosis) y los ojos (oftalmias). Pero obtener esta esencia es laborioso: se requiere fuego durante varios días, y saber hacer. En la Palma d´Ebre tienen el arte de hacer el aceite de enebro. Antaño tenían hornos para obtenerlo, y se tardaba hasta 40 días.
Las bayas también tienen aplicaciones en uso interno y externo. Pero esto no lo he probado, y es mejor que lo consultéis antes de usarlas.
Nosotros, a falta de mayor sabiduría, utilizaremos esta pinchosa planta más modestamente, de dos maneras:
-para curar heridas: maceración de hojas de enebro. Esto se obtiene dejando durante 3 meses macerar un puñado de hojas de enebro en una botella con aceite de oliva. Tenemos ambas cosas. Nada más sencillo.
-repelente de polillas de la ropa: en muchos lugares se pone una ramita de enebro dentro de los armarios para ahuyentar las polillas. Y mirad que hay enebro en los montes...
3 comentarios:
nos dijeron (no lo he podido corroborar) que hay el enebro y el falso enebro. Se distinguen por que el falso enebro tiene dos rayitas en la hoja, i el de verdad solo una.
No lo he contrastado, así que no se que habra de verdad en eso.... pero que si no estas a mas de 700m aprox, casi con total seguridad es un falso enebro. Ya te digo, no se que hay de cierto pero nos lo dijo un agronomo que trabaja en el parque natural dels Ports mientras nos explicaba la flora de la zona.
bueno, va, acabo de buscarlo (me picaba la curiosidad) y efectivamente lo que nos dijeron era cierto. Aquí puedes leer un poco sobre el tema: http://ichn.iec.cat/bages/arbusts/Imatges%20Grans/cc_dec.htm
Mañana haré una entrada con los nombres y la explicación de las dos especies. Va un adelanto: Juniperus oxycedrus es el de las dos rayitas en la hoja, es la cada, càdec en catalán, enebro mayor. El de la única rayita es el Juniperus communis, el enebro común. Aquí en nuestra zona vive el enebro mayor, el càdec.
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