martes, 10 de mayo de 2011

EMPIEZA UN NUEVO DIA PARA TYCHO




A veces tanto esfuerzo no se ve recompensado, y resulta que Tycho no ha querido dormir en su casita, sino...¡al lado de nuestra casa de madera! Como las cabras en su momento, quiere estar con nosotros. ¡Ay Señor!...poco a poco tendremos que acostumbrarlo a su cuadrita, que ahora, con más calma, iremos reforzando. Tendremos que hacer paredes de adobe y sujetar bien las planchas del techo.

Una cosa quiero que quede clara: un caballito no es un juguete. Para tener ahora la capacidad de cuidar este animal, por ejemplo, yo he tenido que chuparme varios años de cursillos para aprender a manejar caballos, para saber sobre su salud y sus cuidados. Ya que no he tenido conocimientos por herencia familiar, he tenido que esforzarme, estudiar y practicar. Estos animales necesitan muchas atenciones: aseo diario, limpieza y alimentación correctas. Son fuertes, aunque sean pequeños, y pueden hacer daño. Sobre todo, a la hora de tener un animal, responsabilidad y preparación.

En la primera foto, Tycho supervisa la construcción de su casita. Y en la segunda, comiendo cortezas de naranja amarga. Se comió dos, la tercera dijo que me la comiera yo.

1 comentario:

David dijo...

Hola Robin,
te recomiendo este libro: http://www.quedelibros.com/libro/55108/El-pie-del-Caballo.html, creo que no iba en la biblia.
CUIDATE!
Abrazos.