Tenemos tendencia a pensar que estos tiempos convulsos que nos ha tocado vivir son los peores desde que existe el hombre sobre la tierra, pero a poco que leamos algo sobre Historia Antigua, nos daremos cuenta de que en todas partes y en todos los tiempos han cocido habas. Nuestro país es especialmente propicio para este tipo de transtornos, ya que desde tiempos inmemoriales ha sido lugar de encuentro y de convivencia más o menos pacífica de gentes venidas del norte y del sur. Estas mezclas milenarias han originado nuestro pueblo celtíbero.
Influencias del norte y del sur: íberos y celtas. Hay una historia irlandesa muy antigua que se titula El robo de ganado de Cooley. En ella se cuenta que ya en la antigüedad, la gente se dedicaba a robarse cosas unos a otros, ya que la imposición del trabajo como manera de ganarse la vida no era contemplada por nuestros sabios antepasados. El ganado se consideraba entonces entre los celtas como la verdadera riqueza, ya que proporcionaba alimento y piel. Esta gente del norte despreciaba a la gente del sur, ya que consideraban que éstos sólo se preocupaban de tener dinero y riquezas: y el oro y las joyas no se comen...Sólo los utilizaban para adornarse, sin darles demasiada importancia como materiales valiosos. Los irlandeses, y por extensión la gente de cultura céltica, eran sin embargo capaces de montar grandes pollos por el robo de algún animal de sus rebaños.
La riqueza entendida de dos formas diferentes: céltica y latina. Y nosotros, los pobres celtíberos, con aportaciones culturales de las dos maneras de entender la vida, hechos un lío: ¿qué concepto de la vida prevalecerá? ¿O nadaremos eternamente entre las dos aguas de la indecisión vital?
1 comentario:
pues yo de corazon soy celtico sin duda siempre pensando en mi ganado y mi tierra pero sin duda esta sociedad nos tira mas al consumismo o como tu dices a la cultura latina del dinero jejeje
buen post
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