miércoles, 29 de diciembre de 2010

UNA HISTORIA DE TERROR: LA CABRA BLANCA


Como véis, Morita es negra. El padre de la criatura que ha de nacer es Peque, el chivo cobrizo. Como salga un chivo o chiva blanco, a mí me da algo. Será la señal de la presencia del Maligno...
¿Por qué?, direis. ¿Se ha vuelto Robin definitivamente loca a causa de comer setas del monte y de tocar líquenes no identificados? No, amigos...ahora os voy a contar una historia verídica. Me la ha explicado mi padre varias veces, y se me pone el vello de punta. Es la historia de mi tatarabuelo, el abuelo de mi padre.
Por aquellos tiempos, en los años 30-40, la familia de mi padre vivía en uno de esos barrios de las afueras de Barcelona. Habían venido de la provincia de Castellón, de un pueblo que se llama Fuentes de Ayódar, buscando mejor fortuna. En esas zonas, aún no bien urbanizadas, abundaban los barrancos, los pequeños montículos pelados, en fin, toda la hermosura de la incipiente civilización urbanita. El abuelo de mi padre era un señor mayor, normal. Hasta que un día...
Estaban todos sentados alrededor de la mesa, y mi tatarabuelo de repente se levantó: empezó a dar mandobles a diestro y siniestro con el bastón, diciendo: ¡mírala, ahí está, ahí está, tengo que matarla, tengo que matarla, es el demonio! La familia se asustó. ¡Pero qué hay! Él contestó: ¿no la veis: ¡es una cabra blanca! Al cabo del rato, el ataque cesó.
Lo llevaron al médico, que dijo que eran tonterías de viejo. Estos ataques le daban de vez en cuando, no muy a menudo. Hasta que un día...

El ataque empezó igual: ¡mírala, mírala, encima del mueble, está ahí, la tengo que matar, es el demonio! Y aquel día, arreó un mandoble más fuerte de lo normal, rompió el bastón, y salió corriendo al exterior, gritando: ¡le he dao, ahora sí que le he dao¡...
Con su paso inseguro, se fue acercando al barranco que había delante de la casa, seguido por la familia, con mi padre entre ellos: y al fondo del barranco, muerta, inerte... había una cabra blanca.
Lo estoy explicando y me están temblando las manos. La historia es real.
Vosotros veréis...como nazca una cabra blanca...

3 comentarios:

anfiaro dijo...

madre mia que susto jejejeje tranquila blanca no creo que te salga ya que el negro y pardo es dominante pero no se

Robin dijo...

Te diré que tengo un mal cuerpo ahora mismo de haber recordado la historia de marras...no sé si voy a dormir esta noche. Como oiga algún ruido...la última vez que mi padre me la contó, luego por la noche se oyó en el comedor de la otra casa un ruido, como si se hubiera movido un mueble.Santo Dios bendito. Como salga blanca...

anfiaro dijo...

jajajja ya te digo yo que no jejejej blanca no sale