martes, 28 de diciembre de 2010

EXTRAÑOS SERES DEL BOSQUE

Ya os he explicado antes que esta noche ha sido movidita, debido a que mi estómago, cuando estoy preocupada por algo, se rebela y se hace notar en forma de delicioso ataque de reflujo gastroesofágico. Quizá para compensar tan desagradable episodio, luego he tenido un extraño sueño, en el cual iba paseando por un hermosísimo jardín de naranjos. Quizá esté abusando de las naranjas ibicencas, porque a la par que las consumo de postre, estoy desayunando la deliciosa mermelada de naranja y bergamota al gusto inglés de Joa. Esas naranjas...
La cuestión es que esta tarde, con las secuelas de un dolor de cabeza fenomenal, me he ido paseando con las cabras a una parte muy húmeda del bosque. Allí habitan unos seres enigmáticos: los líquenes. El que sostengo en la mano crece en el suelo, y están medio sueltos sobre la tierra. En verano quedan reducidos a simples escamas resecas: pero en otoño y en invierno, se hidratan y fructifican, con estas trompetillas que llevan sus células reproductoras. Este es una Cladonia.
Los líquenes crecen en cualquier parte: los hay arborícoras, como el de la segunda foto, que está en las ramas de los olivos en las zonas donde hay mucha humedad. 
Estos seres, simbiosis entre algas y hongos,  sólo necesitan agua, un soporte (piedras, ramas, el suelo) y aire para vivir; pueden resistir larguísimos periodos desfavorables esperando a que lleguen mejores tiempos, recogiéndose sobre sí mismos. Algunos se usan con fines medicinales, como el líquen de Islandia, que además de en esa peculiar isla, crece en toda Europa. Algunas antiguas recetas mágicas llevan líquenes en su composición.
Un día extraño, acompañada por seres extraños...
¡Ah, por cierto! Por si existe la reencarnación, en la próxima vida ¡me pido líquen!

5 comentarios:

Anónimo dijo...

hola robin,
Primero decirte que espero que el ácido de las naranjas no sea el que ocasione los trastornos.
Para tu ataque de reflujo,no he padecido y no conozco mudras,(no se me ocurre más remedio que la sal se frutas o el bicarbonato),
pero para tu dolor de cabeza:
¿ has probado a presionar la fosa nasal derecha y respirar acompasadamente SÓLO con la izquierda durante cinco minutos?
Hay un mudra muy efectivo para aliviar las jaquecas, pero un poco difícil de explicar sin fotos.
De todos modos,cuando se te levante una jaqueca fuerte, prueba a sentarte cómoda y haz un Mukula mudra (muy sencillo: uniendo las yemas de los cinco dedos de cada mano, formando un pico) respirando relajadamente y atendiendo a cada inspiración y expiración durante cinco-diez minutos.
Verás que se apacigua hasta desaparecer.

Cuando te digo ATENDER es prestar atención realmente: calcular el oxígeno que inhalas, cómo expande tus pulmones, el tiempo que permanece en ellos,cómo tu diafragma se abre, cómo fluye hacia el exterior, cómo hace por salir, cómo vuelves a empezar.todos los aspectos mecánicos de cada inhalación
cuando realices el mudra, la respiración debe ser lo más pausada posible, sin exagerarla sólo porque la estás controlando (tu ya me entiendes, no como si se tratase de una parodia de yogi)
Verás que si que ayuda,
Joa

Anónimo dijo...

Siento haber hecho un cometario de mudras en una entrada de líquenes, pero me preocupaba lo de tu dolor de cabeza y lo he visto oportuno.
pongamos que era un inciso y sigamos con las extrañas y hermosas criaturas.
Verzeihung
Joa

Carola dijo...

Robin, he encontrado tu sitio por el huerto de Otiñar, y me ha gustado mucho. Veo que sufres de jaquecas, mi novio tb. El se acuesta con todo apagado y se le va pasando de a poco, pero no se le puede ni hablar en esos momentos. Yo gracias a dios nunca lo he padecido.
Los seres extraños del bosque son hermosos, tengo algunas fotografias de ellos en mi blogsi quieres pasar a verlos. Espero tu aventura este llena de seres maravillosos y menos dolores de cabeza.

besos!!

Carola

Robin dijo...

Hola Carola, bienvenida. La jaqueca de ayer no es propiamente una jaqueca, sino un dolor de cabeza que me da cuando me enfado o me pongo nerviosa, y me viene porque contraigo las cervicales. Afortunadamente no me pasa muy a menudo, aunque en mi familia sí hay antecedentes de jaqueca, y lo que dices, gente encerrándose en lugares oscuros, sin ningún sonido y mortalmente pálidos, incluso con desmayos y vómitos.Un horror.

Robin dijo...

Gracias Joa. Tomo nota. Aunque como le comento a Carola, no es propiamente una jaqueca,porque sé que me lo produzco yo misma contrayendo las vértebras cervicales. Me entran escalofríos todo, Soy tonta.