miércoles, 1 de junio de 2011

EL PRIMER TOMATE

La verdad es que el otro día que hizo tanto calor me entró el síndrome de El Paso, que consiste en verlo todo como en una especie de espejismo vaporoso y con esos cardos rodantes de las películas del Oeste pasando por delante de la puerta de casa. Para mayor recochineo, mi vecino me dejó una revista dedicada a Asturias, con un reportaje sobre los Picos de Europa que empezó a revolverme el cerebro y a hacerme jurar en arameo. Me cago en la leche, con lo verde que hay por ahí, aslkdjñasfksjf...Empero, los dioses se han mostrado benevolentes ante mis amenazas, y han decidido enviar una tongada de lluvias benefactoras que han servido para que el huerto se revitalice. Las tomateras están exuberantes, y...¡ya tenemos el primer tomate formándose! Y...¿adivináis de qué variedad se trata? Pues...nuestro Crimean Black, que es la forma pija de decir el negro de Crimea, que ya vaticiné yo que iba a ser una de las variedades más interesantes para cultivar en esta zona. Bien, bien, bien...

1 comentario:

veronica dijo...

mmmmmm.... pues ya intercambiaremos semillas!!! Nosotros tenemos unos cherries que son una pasada, dulces dulces y más que tomateras parecen mala hierba porque son durísimas, y vuestro clima y tierra es muy parecido al nuestro