Hace dos días que aquí hay niebla por la mañana. Y otros días ha habido niebla. La niebla se forma cuando hay anticiclón, y aparece la inversión térmica. Las capas de aire quedan estancadas.
Aquí, cuando pasa eso, el aire acumula olores: huele a humo de la chimenea, a bosque, a tierra, a pan cuando horneamos.
Estos días en Urbanilandia están en alerta: en Madrid y Barcelona se han disparado los índices de contaminación, especialmente los de dióxido de nitrógeno, productor de grandes yuyus pulmonares. Es lo que llaman la boina negra. Los neumólogos están recomendando a la gente con patologías respiratorias que no salgan a la calle.
Esto es muy grave: y la gente ya no le da ni importancia. Siguen con sus actividades habituales, como si nada pasara: hoy oía por la radio un hombre que decía: sí, pica la garganta, escuecen los ojos, cuesta respirar y si te pasas un algodón por la cara, sale un polvo negro. Pero es lo que hay.
Mirad las fotos del cielo que hay aquí. Hay muchas en el blog. Es azul turquesa. Tú verás...
No hay comentarios:
Publicar un comentario