Cástor y Póllux, jugando jugando, van midiendo sus fuerzas. De momento la cosa no vas más allá que un intercambio de topazos fraternales. Un poco fuertes a veces, pero no se ve mala intención. Con su padre no se atreven: solamente Cástor, el más fortachón, ha hecho algún intento de aproximación desafiante, pero Peque se lo queda mirando fijamente, y el tierno infante pone tierra de por medio.
Esperemos que la cosa siga por estos senderos, de juego y buen rollito.
4 comentarios:
Te acuerdas de aquellos gorros de mimbre que se llamaban "Barret de cop"¿? ya mismo los veo a los tres con ellos.....jejje
Supongo te refieres a las chichoneras...es que los que somos de origen urbanilándico y además acharnegaos, no dominamos algunos vocablos de enjundia. Josep sí, por supuesto, que es d´Igualada, escolta...pero yo con abuelos de La Unión...aunque oye, hoy me he enterado que Ferran Adriá tiene sus orígenes en La Unión también, sus abuelos eran de allí...igual somos familia y todo. Le preguntaré si quiere venir a inaugurar la casa de Mateu Escolá...cuando funcione, de restaurante claro, no de La Mazmorra de la Palma...
Aunque a eso igual se apunta también...:0
Buenoooo!!!! juer que lujo.......ahora que esta de año sabatico con la fundacion seguro que viene y si le llamas primo......jejjejej primo Feran.........ahora entiendo todos esos riquisimos manjares que preparas con las cosechas ;)
Y espérate, que Josep era el entrenador de fútbol del sobrino de Carles Gaig, criatura ésta que ahora trabaja de sumiller en el restaurante más afamado de Carles (lo pongo así para chulearme, como si yo lo conociera de toda la vida, sabes...uala¡¡¡¡¡¡¡), de manera que...aquí vamos a montar un garito que ni te cuento.
Publicar un comentario